La boda de Carlos de Inglaterra y Camila vuelve a ser el centro de un debate constitucional en el Reino Unido. Un documento oficial difundido ayer por la prensa británica revela que los asesores legales del entonces gobierno de John Major advirtieron al heredero, a raíz de su divorcio de Diana de Gales, hace una década, de que no podía volver a casarse por el registro civil, hecho que amenazaría su sucesión al trono. La misiva añadía que la Iglesia anglicana tendría la "obligación moral" de rechazar la unión entre dos divorciados. Estas directrices fueron revertidas por lord Falconer, experto en cuestiones legales, dos meses antes de la segunda boda de Carlos, que antepuso los principios recogidos en el acta de derechos humanos, pero omitió desvelar la existencia del anterior memorándum. Expertos constitucionales aseguran que la salida a la luz de aquel documento plantea nuevas dudas sobre la validez del segundo matrimonio de Carlos.
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1 comentario:
Pregunto: porqué esa obsesión con la belleza? es acaso de familia? jejeje... tienes buen ojo para tomar fotos.
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